Redacción: Francisco Melo.

“Elizabeth”, nombre protegido, en entrevista para panorama Informativo da a conocer que el pasado lunes 12 de mayo, vivió una de las experiencias más traumáticas de su vida, cuando se acercó a uno de los cajeros automáticos ubicados en el centro de la ciudad de Tulcán a retirar una cierta cantidad de dinero y de repente sintió mareo, náuseas y finalmente perdió el conocimiento. Indica que fueron momentos de desesperación, especialmente con su hijo de once años, quien le llevó hasta emergencias del hospital de la ciudad, en donde luego de la respectiva revisión, le indicaron que habría inhalado escopolamina.
No recuerda nada desde el momento que hizo el retiro del dinero, luego según la versión de su hijo de once años, quien la acompañaba, habría retirado una cantidad adicional desde otro cajero y finalmente se desvaneció. No recuerda haber mirado a ninguna persona, sin embargo, el valor de los dos retiros, no estaba en su poder.
Para el Mayor de Policía, Alberto Rubio, la escopolamina es una sustancia altamente peligrosa cuando es utilizada por individuos que buscan hacer daño. No solo ocasiona pérdidas materiales, sino que puede afectar seriamente a la salud física y mental de una persona e incluso provocar su muerte. Por ello, la Policía Nacional pide a los ciudadanos tomar medidas de seguridad para evitar caer en manos del hampa y en el caso de retiro de dinero en cajeros automáticos, estar siempre atentos a personas que estén cercanos y con actitud sospechosa, además ir en compañía.
“No es la primera ves que sucede en la familia, en meses anteriores, mi padre tuvo los mismos síntomas después de haber utilizado un cajero automático” dijo con preocupación la afectada.